Comienza con la práctica del mindfulness

Seguro que no es la primera vez que oyes hablar del mindfulness, pero…¿sabes en qué consiste? ¿alguna vez lo has probado? Si quieres entrar en este mundo, nuestro post de hoy te interesa. ¡Arrancamos!

Como sabes, eso de vivir el momento es algo que a día de hoy suena bastante utópico, porque aunque parezca una contrariedad, técnicamente estamos en el presente y no en otro tiempo, la realidad es que sólo se permite esa afirmación con nuestro cuerpo. La mente, mientras tanto, se permite el lujo de ir y venir sin prestar atención al aquí y ahora. Eso es, precisamente, el mindfulness

El mindfulness es la práctica de la atención plena, es estar completamente enfocados en el momento presente, sin pensar ni distraernos con el más allá. Se trata de una técnica clave para tratar problemas de salud mental como el estrés, la ansiedad, la depresión y el trastorno de estrés postraumático, así como otros síntomas físicos. En resumidas cuentas es impedir que mientras hacemos algo, estemos pensando en otras cosas que hacen que no disfrutemos de cada experiencia plenamente. Imagínate, estás cocinando, pues bien, la práctica del mindfulness implica estar concentrado en los ingredientes, los pasos a seguir para lograr tu receta, sin pensar en que después tienes que ir por los niños al cole o a hacer la compra. 

SI QUIERES EMPEZAR…¿CÓMO HACERLO?

Los expertos explican que las prácticas del mindfulness son muy sencillas y accesibles para todo el mundo, sea cual sea su edad, profesión o religión. Ellos mismos hablan de 2 prácticas para mejorar la capacidad de vivir el momento presente. Distinguen entre prácticas formales e informales, las cuales pueden ser integradas en cualquier acción que realices en tu día a día.

La práctica formal sería la meditación y la práctica informal consiste en hacer ciertas actividades de la vida cotidiana de forma consciente, evitando automatismos. 

TRES EJERCICIOS DE MINDFULNESS PARA PRINCIPIANTES

Siguiendo la estela de la práctica informal, podríamos elegir cualquiera de las actividades que solemos hacer de manera inconsciente para empezar a practicar el mindfulness. Estos tres ejercicios que nos indican los expertos en mindfulness de Petit Bambou podrían ser los ideales para iniciarse en la práctica consciente:

Ducha consciente: ¿por qué no pruebas a aprovechar ese momento para prestar atención al sonido del agua, la temperatura, la sensación del agua sobre la piel, el olor del champú, etc.? Sería un buen momento para que aproveches a poner atención en estos puntos, en vez de pensar en la agenda del día siguiente o tu próximo viaje.

Paseo consciente: presta atención a los movimientos del cuerpo al andar, a cómo se reparte el peso en los pies, los sonidos que te rodean, los olores, la sensación del movimiento de la ropa sobre el cuerpo al andar…

Cocinar consciente: para luego comer de forma consciente. Presta atención al sonido al cortar las verduras, el olor que desprenden, el sonido al cocinarlas en la sartén, la textura de los alimentos en contacto con tus manos…

Esperamos te sea de ayuda.

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